PROPUESTAS INICIALES PARA EL DISEÑO DE UN PROGRAMA ELECTORAL Y PLAN DE ACCION CLIMATICO

A continuación se proponen algunas medidas iniciales que pueden ayudar a mejorar a los partidos políticos en la redaccion de sus programas de gobierno en relación con la política climática y medioambiental. Un argumento principal tendra que ver con la importancia de reformar o adaptar sus estructuras internas como paso previo a llevar a cabo una accion de gobierno coherente en los Ayuntamientos:
  • Integrar el conocimiento científico en el diseño de políticas. Uno de los aspectos fundamentales que justifica el desarrollo de esta guía, tiene que ver con la importancia de integrar el conocimiento científico y el estudio del cambio climático en el diseño de políticas, así como la promoción de una mayor formación y concienciación a todos los niveles. 


Sin embargo, pese a los avances científicos con respecto a la incidencia del Cambio Climático, este conocimiento no se ha traslado de la forma esperada a una acción política acorde con los desafíos que se presentan para las sociedades humanas en el futuro, por tanto, se hace necesario:
  • Una reflexión profunda sobre los procesos de cambio necesarios. Se requiere por parte de los partidos hacer una reflexión profunda y estudiar las políticas actuales y futuras, asi como las estructuras políticas, con el objetivo de hacer llegar de una forma mas efectiva los mensajes de la ciencia y las acciones que se deben llevar a cabo tanto desde las esferas política, social o económica entre otras.  
  • La sostenibilidad medioambiental y la lucha contra el cambio climático deben ser pilares fundamentales en las propuestas políticas y el diseño de programas de gobierno, existiendo la obligación de integrar, formar y concienciar en materia medioambiental y climática por parte de los partidos políticos locales.   
  • Crear áreas de trabajo específicas en materia y política climática en los partidos políticos locales. Estas áreas deben estar dirigidas a la formación interna, externa y al diseño de políticas de gobierno. Frente a las lagunas de conocimiento, se hace necesario reconocer estas carencias y el desarrollo de estructuras a nivel interno que permitan aumentar el conocimiento del problema y la capacidad de identificar políticas aplicadas al mismo.  
  • Integrar el componente medioambiental y climático como una política transversal. La política climática debe impregnar y hacer porosas a cada una de las áreas y políticas que dan forma a la acción de Partido y al futuro diseño de políticas. El mensaje debe filtrarse a lo largo de todas las estructuras verticales de arriba a abajo y de abajo a arriba.  
  • Trasladar esa conciencia y acción desde las estructuras internas al compromiso político y ciudadano, ya sea desde posiciones de gobierno o de oposición.  

Para alcanzar estos objetivos, se propone como marco en esta guía y sus recomendaciones el concepto de Integración de la Política Climática, considerándose como la integración de la dimensión del cambio climático en todas las áreas de diseño de políticas.  

A partir de estas propuestas iniciales, se pueden identificar igualmente algunos problemas y propuestas que deben enfrentar los partidos, las administraciones, pero también la ciudadanía a la hora de desarrollar una política medioambiental y climática coherente que realmente responda a las necesidades y a los desafíos futuros.
  • Dar contenido al uso de la terminología vinculada a las políticas medioambientales, el desarrollo sostenible o la lucha contra el cambio climático. Muchas veces su uso se hace de una forma demagógica y como muletillas dedicadas a rellenar huecos en el discurso político, lo que les hace perder valor.  

Igualmente, en los últimos años las políticas medioambientales se han supeditado al desarrollo urbano, utilizándose en beneficio de los intereses vinculados al sistema productivo que durante los años se ha basado en la construcción. Por un lado este modelo económico ha desincentivado el desarrollo de modelos sostenibles, y por otro lado las propuestas de construcciones y urbanizaciones “sostenibles” han sido utilizadas de forma interesada con el objetivo de seguir alimentando un modelo económico especulativo y ajeno a los intereses de la sociedad en su conjunto.  Por tanto se debe:
  • Desacoplar definitivamente las políticas medioambientales de aquellas vinculadas a la especulación urbanística. Todavía estamos en proceso de desintoxicación o desacoplamiento de este modelo, y lo que no parece responsable ni serio es hacer creer a la ciudadanía que con más ladrillo se van a resolver los problemas económicos y de empleo.  
  • Invertir la importancia de estas políticas, dando una mayor prioridad y diseñando las políticas urbanísticas a partir de criterios medioambientales y climáticos. De hecho, la importancia del modelo urbanístico especulativo ha llegado a desvirtuar otras iniciativas realmente fundadas y sostenibles desde los ámbitos económicos, o de desarrollo urbano, haciéndoles perder valor y penetración en la sociedad.  
  • Superar de forma cooperativa los espacios de interdependencia política. Otro problema evidente a la hora de integrar la política climática dentro del estado español son los niveles de interdependencia política. La existencia de competencias o responsabilidades poco claras, o indefiniciones presupuestarias entre otros aspectos, debido en parte a la falta de definición, importancia y asunción de las políticas climáticas y medioambientales, deben ser superadas.


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