La mejora de las infraestructuras ciclistas en la ciudad, y la culminación de las redes ciclistas, conectando los barrios y los puntos de tránsito entre si de una forma más segura y cómoda debe ser otro de los objetivos generales a proponer y llevar a cabo. Se propone a este respecto:
- Aumentar en las partidas presupuestarias dedicadas al transporte, aquellas dedicadas al transporte a pie y en bicicleta.
- Desde los Ayuntamientos se fomentara el uso del ciclismo entre sus trabajadores, promoviendo campañas y funcionarios encargados de esta promoción.
- Se debe ahondar en el compromiso de establecer más aparcamientos de bicicletas en la ciudad con una especial atención a los centros neurálgicos (organismos administrativos, centros deportivos, estaciones, etc.,) y zonas residenciales, instalándose más señalizaciones para el trasporte en bicicleta.
- Del mismo modo se debe adecuar y facilitar que los sistemas de transporte público como autobuses y trenes puedan transportar bicicletas de una forma práctica y poco molesta.
El objetivo debe ser que la mayoría de la gente pueda tener la facilidad de acceder a sus puestos de trabajo a través de transporte si fueran capaces de integrar un corto paseo en bicicleta en sus desplazamientos.
- Se debe seguir trabajando en la mejora de los carriles bici, resolver los errores iniciales que se hayan podido cometer en su primer diseño y construcción, y continuar construyendo carriles-bici separados físicamente de las carreteras, que permitan que la práctica del ciclismo sea más segura, adaptándose a los estándares de seguridad y permitan reducir el número de accidentes.
- En ciudad el trabajo debe dirigirse también a la conexión entre rutas ciclistas, haciéndoles formar de una red local compacta y segura, y capaz de facilitar el tránsito con otros medios de transporte.
- Con respecto a los sistemas de alquiler de bicicletas, y reconociendo su implantación en muchas ciudades, un objetivo debe ser el de optimizar y buscar la mayor eficiencia en su funcionamiento y/o creación. En algunos casos estos sistemas pueden llegar a suponer un gasto desproporcionado y no justificable, llegándose a manipular las estadísticas de uso con fines electorales.
- En ese sentido, se debe conseguir, con la colaboración de las empresas, que un mayor número de puestos de trabajo sean accesibles en bicicleta o través de la combinación de la bicicleta y otros medios de transporte.
- Como respuestas que desde los Ayuntamientos se pueden proponer, siendo estas acciones menos costosas y comunitarias, puede estar la financiación y apoyo para la creación de talleres colectivos en donde los ciudadanos puedan reparar sus bicicletas y además puedan servir como centros en donde hacer comunidad, ciudad y valores alrededor de los medios de locomoción no contaminantes.
- Debe ser función de los Ayuntamientos el ocuparse de instruir a los ciudadanos en el uso de la bicicleta en la ciudad con cursos y programas de formaciones para aumentar el uso y la seguridad al circular en bici por la ciudad.
- Otras acciones deben estar dirigidas a concienciar tanto a peatones como a conductores de vehículos de la importancia y el respeto que tiene el transporte en bicicleta y los ciclistas en la ciudad.
- Lanzar iniciativas de promoción del uso de los espacios públicos y las calles, tipo “Calles de Verano” en donde durante la época estival y días festivos las calles con menor trafico sean cerradas para las coches y sean para que la gente y las bicicletas las ocupen.
En el ámbito escolar, las instituciones municipales también tienen una especial responsabilidad en la promoción del transporte en bicicleta a la escuela de niños y jóvenes.
- Elaborando estrategias de Rutas Seguras a la Escuela.
- Asegurándose que las escuelas colaboran, elaboran y participan de estas rutas seguras y planes de viaje en bicicleta para sus alumnos desde casa a la escuela.
- Fomentando la creación y el seguimiento de grupos guiados de estudiantes que acudan a las escuelas en bicicleta.
- Promoviendo iniciativas de senderismo y ciclismo en las escuelas.
- Creando Comités de Rutas Seguras, que integren a padres, maestros, policía y administración, que permitan identificar los problemas de tráfico y dificultades para usar la bicicleta y desplazarse a las escuelas e institutos en las ciudades y buscar los medios para resolverlos.
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